Es uno de los teléfonos estrella de la temporada y como tal su análisis es posiblemente uno de los más esperados entre los que se enamoraron de él a primer vista. A estas alturas no hace falta que te demos más pistas: hablamos del
HTC Desire, uno de los últimos terminales presentados por la casa en la
MWC y, sin lugar a dudas, el androide más potente con el que cuenta en estos momentos la compañía. Si quieres conocerlo con más detalle, ya estás tardando: relájate, haz clic en "sigue leyendo" y comienza a descubrir sus detalles. Te esperamos tras el salto.
En un cuerpo de 119 mm de alto x 60 mm de ancho y un grosor de unos cómodos 11,9 mm se embute el nuevo superteléfono de
HTC. El Desire cuenta con líneas marcadamente redondeadas que recuerdan indudablemente al Nexus One (se le podría considerar un hermano mellizo de éste prácticamente). El frontal se encuentra presidido por una gran pantalla de 3,7 pulgadas y en su parte inferior se alojan los 3 botones principales de control -"Home", "Menú" y un tercero doble con las funciones "Atrás" (a la izquierda) y "Buscar" (a la derecha)-. Junto a la botonería encontramos además una de las nuevas señas de identidad de la casa: el joystick o cursor óptico.
Mientras que el lateral derecho se encuentra totalmente desnudo y en la parte inferior sólo está alojado el puerto microUSB y un diminuto micrófono, en el lateral izquierdo hay sitio para el control de volumen, reservando la zona superior para el conector de 3,5 mm y el botón de encendido/apagado (ligeramente inclinado hacia delante pero de fácil pulsación). Este último por cierto es el único que permite el desbloqueo de pantalla del teléfono, no respondiendo ninguno de los demás a nuestros toques cuando el panel está apagado.
A pesar de que casi en su totalidad el terminal es de color negro, alrededor de la pantalla se dibuja un elegante marco (de aluminio mate y tacto suave) en color amarronado, que tiñe también los citados botones de control de volumen y encendido/apagado, otorgándoles así un resultado algo más discreto a primera vista.
Finalizamos este recorrido fijándonos en su parte trasera. Ésta también es de plástico aunque su acabado, a diferencia del delgado bisel marrón, es de tipo gomoso, resultando sedoso al tacto y facilitando un buen agarre del terminal con la mano. En esta carcasa hay sitio para el, cada vez más común, "With HTC Sente" grabado en la parte baja y para el logo de la casa en relieve unos centímetros más arriba. Casi tocando el borde se encuentra la cámara, junto al flash y el altavoz del teléfono. De nuevo aquí, la compañía vuelve a cometer (a nuestro juicio) el mismo error que con el
HD2, colocando una montura para la cámara que sobresale de la espalda del teléfono, siendo así objeto por tanto de roces y rayones cada vez que el Desire se apoya boca abajo (aunque la lente siempre está protegida por un panel protector, claro).
En cuanto al peso del dispositivo (135 gramos con batería incluida), el cuerpo se siente sólido pero no incómodo de llevar. Además, a pesar del tamaño de su pantalla, el Desire resulta fácil de manejar con una sola mano.
enlace:http://es.engadget.com
ARTURO LUGO-apocusant
1 comentario:
ahhh... y es taiwanes loco!!!!!! aca sale mucho mas barato!!!!! son capos estos tesa'i... jajajaja
Publicar un comentario